«Teníamos razón», se ha reafirmado Pedro Sánchez. «Teníamos razón los que hemos defendido siempre que en democracia, como en la vida, es mucho más poderoso el perdón que el rencor, la convivencia que la confrontación y la unión que la división», ha añadido hoy en Barcelona el presidente del Gobierno sobre la victoria del PSC en las elecciones catalanas del pasado domingo.
«Fueron dos presidentes de derechas los que quebraron la convivencia en Cataluña y España y seremos dos presidentes socialistas los que hagamos que avancen en progreso económico, convivencia y justicia social durante los próximos cuatro años», ha pronosticado el secretario general del PSOE en referencia al ganador del 12-M y aspirante a presidir la Generalitat, Salvador Illa.
Los socialistas han organizado este mediodía un acto para celebrar la victoria del PSC en los comicios autonómicos y como espaldarazo a la candidatura para las elecciones europeas del próximo 9 de junio que encabeza la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
«Lo que triunfó el domingo es la convivencia y la gestión, que es lo que ha necesitado Cataluña durante mucho tiempo», ha dicho Sánchez sobre la victoria del PSC, la primera ocasión en que gana unas autonómicas en votos y también en escaños, al obtener siete diputados más que la segunda fuerza, Junts (42 frente a 35). «La ciudadanía dijo alto y claro que Cataluña también quiere a España», ha valorado sobre la foto final que dejaron las urnas hace seis días.
«Nosotros no hemos mirado para otro lado, hemos propuesto una solución viable para Cataluña y el conjunto de España», ha expuesto Sánchez en comparación a etapas anteriores. En este sentido, ha añadido que «los problemas se tienen que afrontar, no rehuirlos y exacerbarlos como hacían Mariano Rajoy y quienes gobernaban en Cataluña en 2017″ y ha sacado pecho: «España no se rompe y no se hunde como dice la derecha, es más próspera y está más unida que cuando gobernaba el PP en 2017 y eso es gracias a los socialistas».
El presidente del Gobierno ha llamado a «sentirse orgullosos de este modelo de país» y de «los logros sociales y económicos en un contexto geopolítico tan difícil». Por eso, ha reprochado que «el catastrofismo» que atribuye a los líderes del PP y Vox, Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal, «es el mayor de los bulos de la derecha y la ultraderecha».
Para el secretario general del PSOE, «lo que rompe las sociedades es la claudicación de la derecha tradicional al discurso y la ideología de la ultraderecha». Y eso sucede, ha dicho refiriéndose a Feijóo, «cuando escuchamos a un dirigente de la derecha tradicional equiparar inmigración con inseguridad, decir que el cambio climático es dogmatismo o hablar de violencia de género como un divorcio duro».
Siguiendo esta línea, el jefe del Ejecutivo ha sostenido: «Mientras Cataluña y España miran con esperanza al futuro, Feijóo y Abascal miran al pasado procés independentista con añoranza porque, cuando gana la convivencia, se quedan sin discurso».
Primera fuerza en Cataluña
En un recinto abarrotado, con más de un millar de personas, el socialismo ha celebrado el ciclo abierto con Illa en las elecciones al Parlament de 2021, cuando empató a 33 escaños con Esquerra Republicana pero se impuso en votos. Tres años después, el PSC se ha situado, sin discusión, como la fuerza política con más apoyos en Cataluña en todas las citas: municipales, autonómicas y generales.
No ha habido en todo el acto mención a pactos o negociaciones poselectorales, sino ambiente de reivindicar lo logrado en las urnas. «Cataluña ha dicho que quiere seguir comprometida en la defensa de esta España plural y diversa que lidera Sánchez», ha señalado Illa en su intervención.
Con su candidatura, el primer secretario del PSC consiguió el domingo igualar la segunda mejor marca socialista en escaños en unas elecciones al Parlament. Los 42 diputados del 12-M, cifra idéntica a la de los comicios de 1988 y 2003, solamente se han superado una vez, con los 52 que consiguió Pasqual Maragall en 1999.
Por eso, Illa ha invitado a los socialistas del resto de las regiones a sentir el resultado de la semana pasada como «una victoria compartida». El presidenciable ha agradecido el apoyo de quienes «estuvieron al lado del PSC» en los momentos más complicados para el partido, los años más agitados del procés, cuando cosechó sus peores resultados, con los 16 escaños de las elecciones autonómicas de 2015 y los 17 en las de 2017.