Oriol Junqueras ha comparecido este lunes en la Comisión de Investigación del Congreso sobre la denominada operación Cataluña en una larga sesión de casi tres horas en la que ha revelado un dato que no se sabía hasta ahora: que tuvo la «oportunidad» de impartir «clases variadas» a dos miembros del PP, el ex ministro Rodrigo Rato y el ex tesorero Luis Bárcenas, cuando coincidieron todos en la cárcel de Soto del Real, en Madrid.
«A nivel personal, era gente encantadora, educada, amable…», ha detallado el ex vicepresidente de la Generalitat y profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona, que pasó tres años y medio en prisión por la celebración del referéndum ilegal de independencia del 1-O. Además, ha explicado que tenía prohibido impartir Matemáticas, «porque pueden usarse para delinquir» según la «respuesta oficial» que se le dio, de Historia, «porque es una herramienta de manipulación masiva», y de Filosofía, porque «invita a cuestionar el orden vigente».
En cambio, en una conversación distendida con el diputado de su partido Gabriel Rufián, el líder de ERC ha apuntado que de Física, «curiosamente», sí que pudo dar clase. A lo que ha apostillado con sorna: «Se me ocurren más elementos susceptibles de alguna inspiración…».
Durante su intervención, Junqueras ha insistido en la teoría de la operación Cataluña, que apunta a la supuesta persecución a los líderes independentistas por parte del Gobierno de Mariano Rajoy, a quien ha situado como «cerebro» de la misma. «Si no fue él sería muy extraño porque entiendo que un presidente no dejaría que alguien tomase una decisión como ésta sin su consentimiento», ha señalado agregando que lo que puede «constatar» es que «un ministro del Interior [Jorge Fernández Díaz] le daba instrucciones a un juez para que inventase».
Además, el dirigente inhabilitado ha puesto como ejemplo de esta presunta conspiración contra la disidencia política al propio Bárcenas, que tenía «responsabilidades muy evidentes en la contabilidad del PP», que recibía mensajes del propio jefe del Ejecutivo «diciéndole ‘Luis, sé fuerte’, y al mismo tiempo le fabricaban una investigación como la Kitchen«: «Si lo han hecho contra miembros de su partido cómo va a sorprendernos que lo hagan contra otras personas que no son de su partido».
La creación de esta comisión de investigación fue aceptada por el PSOE dentro del pacto para la investidura de Pedro Sánchez suscrito con Junts para detectar posibles casos de «lawfare» o persecución judicial premeditada contra el independentismo. El socio minoritario de la coalición, Sumar, ha afirmado en la sesión de este lunes que Junqueras fue víctima de una «persecución injusta».
Por su parte, el PP ha denunciado que la izquierda ha «comprado el relato» de los secesionistas para «justificar la amnistía» y que no se busca «ni la verdad ni reconciliación, sino revancha» de quienes fueron procesados «con todas las garantías» y perdonados «no por justicia, sino por cálculo político». En Vox, a su vez, han incidido en que Junqueras «delinquió contra el orden constitucional y sufrió las consecuencias», aunque le reconocen la «hombría de bien» de quedarse en España «a cargar con las consecuencias», no como Carles Puigdemont y su compañera de ERC Marta Rovira.